La Academia Dominicana de Medicina, la Sociedad Dominicana de Cirugía Plástica y Reconstructiva, directivos del Colegio Médico Dominicano (CMD), docentes e investigadores analizaron la necesidad de detener el avance de la alogenosis Iatrogénica en el país, enfermedad de grave peligro para la salud producida por la inyección de sustancias para fines cosméticos.
En el panel académico titulado Alogenosis latrogénica: un mal que se extiende en la República Dominicana, participaron los doctores Severo Mercedes, jefe del Servicio de Cirugía Plástica del Hospital Salvador B. Gautier; Héctor Herrand, presidente de la Sociedad Dominicana de Cirugía Plástica y Reconstructiva; Sandra Cabrera, dermatóloga-cosmiatra, y Togarma Rodríguez, médico bioeticista y presidenta de la Academia de la Medicina. Los especialistas coincidieron en que este panel responde a la preocupación de la comunidad científica que ve avanzar sin control casos de deformaciones y muerte de tejidos de muchas mujeres sometidas a estos procedimientos.
Por tal motivo, se analizaron los aspectos técnicos y éticos que ocasiona este mal. El doctor Mercedes expuso los daños a la salud que están causando la inyección de sustancias no aprobadas, sobre todo deformaciones en el cuerpo. Puso como ejemplo los casos de rellenos con sustancias como aceite mineral, aceite vegetal, cera, silicona fluida, polimetilmetacrilato o biopolimero.
El doctor Herrand explicó que las deformaciones y otros males provocados en las mujeres tienen un impacto en el desenvolvimiento social de las mismas, debido a que cuando reciben el daño, las pacientes afectadas no quieren salir de sus hogares. Definió el impacto del uso de biopolimeros como "una verdadera epidemia, una calamidad pública". Mientras, la doctora Cabrera aclaró que no todas las sustancias son dañinas, sino aquellas que no están aprobadas por las entidades internacionales sobre el tema.
La doctora Togarma Rodríguez expresó que esta actividad forma parte de la agenda que desarrolla la Academia Dominicana de Medicina para debatir temas de interés científico de la comunidad médica, a la vez que desaprobó esta práctica señalando que la misma es éticamente inaceptable, moralmente reprochable y legalmente sancionable.
Los expertos que participaron en el panel expusieron la necesidad de que en el país se inicie una campaña a nivel nacional, que tenga como finalidad evitar que la práctica continúe. Asimismo, llamaron a las autoridades de salud a actuar contra médicos y centros estéticos no autorizados.