El gigante francés de la cosmética ha concluido los nueve primeros meses del ejercicio (periodo finalizado el pasado 30 de septiembre) con un retroceso del 0,4% en su cifra de negocio, hasta 16.565 millones de euros. La compañía ha anotado esta leve caída debido al mal comportamiento de su negocio en varias de las zonas geográficas en las que opera.
La primera de ellas es Latinoamérica, en la que L'Oréal ha concluido el periodo con un retroceso del 5,2% en su facturación, hasta 1.342 millones de euros. Le sigue el este de Europa, donde la compañía también ha reducido sus ventas un 5,2%, hasta 1.194 millones de euros; y Estados Unidos, región en la que la cifra de negocio de L'Oréal ha caído un 2,7%, hasta 3.946 millones de euros.
La nota positiva la pone la región de África y Oriente Medio, que ha concluido los nueve primeros meses del ejercicio con un incremento del 10,1% en su cifra de negocio, hasta 424,3 millones de euros.
Por divisiones de producto, la de gran consumo es la que más ha sufrido en el periodo, con una caída del 3,2% en sus ventas, hasta 8.057 millones de euros. El resto de áreas de negocio de L'Oréal han visto crecer su facturación en los nueve primeros meses.
La división de cosmética activa, con un 4,9% más, es la que ha anotado un mayor crecimiento de sus ventas, hasta 1.301 millones de euros, seguida de la división de lujo, que ha incrementado un 3,2% su cifra de negocio, hasta 4.402 millones de euros, y la de productos profesionales, que ha elevado sus ventas un 0,1%, hasta 2.250 millones de euros.
En los nueve primeros meses del ejercicio, L'Oréal cerró la venta de Galderma a Nestlé, con la consiguiente integración de 48,5 millones de acciones a su cartera, así como la compra de la marca de cosmética NYX Cosmetics y la de coloración y cuidado del cabello Niely Cosmeticos.